La salud de nuestro hogar y de nuestro espacio laboral incide en nuestro confort y bienestar físico y emocional. La certificación WELL es un sistema de puntuación dinámico que se encarga de medir y monitorizar una serie de parámetros de los espacios construidos. Estos parámetros tienen relación directa con la salud de las personas que los ocupan.
Áreas de actuación de la Certificación WELL:
La Certificación WELL (o el Well Building) tiene en cuenta varios criterios o áreas de actuación. Trabajar para mejorar estos elementos u ofrecer el mejor rendimiento de los mismos garantiza el bienestar y mejora la salud de las personas. Son los siguientes:
1. Aire. Esta certificación tiene en cuenta la calidad del aire que se respira en el interior de los espacios. Por y para ello, se trabajan diversas estrategias que tienen el objetivo de mantener el aire limpio y libre de contaminantes. Algunos ejemplos de estas estrategias son los siguientes: ventilación natural y mecánica, sistemas de filtrado del aire, control de la aparición de humedades…
2. Agua. El consumo de agua de calidad es la base de una buena salud. Un edificio con Certificación WELL tiene que poder ofrecer puntos de acceso de agua potable de buena calidad mediante la filtración, el tratamiento y la localización estratégica de puntos de agua.
3. Alimentación. Este tipo de edificios debe ofrecer información sobre una alimentación saludable y facilitar el acceso a opciones alimenticias que sigan esta filosofía. Los comedores con comida saludable y ofrecer fruta y verdura diariamente son algunas opciones para el caso de los entornos laborales.
4. Iluminación. Los sistemas de iluminación tienen un impacto directo en la calidad del sueño nocturno de las personas. En el contexto laboral, inciden en el rendimiento y productividad. La Certificación WELL tiene en cuenta el acceso a la luz natural y la calidad de la luz artificial.
5. Movimiento. Los edificios con este tipo de certificación deben promover actividades que posibiliten una vida activa para mitigar los problemas de salud derivados del sedentarismo.
6. Aislamiento térmico. Los espacios deben estar construidos y diseñados con el objetivo de evitar pérdidas energéticas y garantizar un mayor confort térmico y ahorro energético.
7. Aislamiento acústico. El ruido tiene efectos nocivos para la salud. Produce alteraciones del sueño, estrés y depresión, entre otros. El Well Building debe garantizar espacios que protejan de la contaminación acústica y reduzcan los efectos nocivos del ruido.
8. Materiales. Para poder obtener la Certificación WELL se realiza un análisis de los componentes de los materiales utilizados en la construcción. Así, se garantiza un ambiente libre de tóxicos tanto para la salud de las personas y animales de compañía.
9. Mente. Sobre todo en el entorno laboral, la construcción y el diseño de los espacios debe velar por garantizar la salud mental. El contacto con la naturaleza y algunas políticas laborales se tienen en cuenta para medir y monitorizar este punto.
9. Comunidad. Este concepto tiene en cuenta la creación de comunidades inclusivas e integradas en materia de justicia social, compromiso cívico y diseño accesible.
Beneficios del Well Building:
Los edificios Well tienen beneficios para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. El Estándar de Construcción WELL tiene en cuenta que trabajar en los elementos anteriormente mencionados impacta positivamente en los siguientes sistemas:
- Cardiovascular
- Digestivo
- Endocrino
- Inmunitario
- Integumentario
- Muscular
- Nervioso
- Reproductivo
- Respiratorio
- Óseo
- Urinario
Pero además, un edificio con certificación WELL garantiza el ROI (Return of Investment). Al tratarse de espacios saludables, son muy atractivos para la venta y no se devalúan con el paso del tiempo.
La bioconstrucción para una certificación Well:
Seguir los criterios de la bioconstrucción es una forma de construir y edificar viviendas y espacios laborales para conseguir la Certificación WELL. Recordemos que la bioconstrucción tiene en cuenta los siguientes puntos, entre otros que puedes consultar aquí:
- El estudio geobiológico del lugar donde se va a edificar para detectar posibles alteraciones geofísicas que puedan afectar negativamente la salud de las personas.
- La estructura de la edificación, eligiendo materiales naturales (cerámica, arcilla, paja, madera…) y pinturas y barnices libres de tóxicos.
- Las instalaciones eléctricas se deben pensar de manera que los espacios dispongan de tomas de tierra y eviten campos eléctricos sobre todo cerca de los lugares de descanso.
La pandemia por el coronavirus ha puesto de manifiesto que la salud es lo primero y que nuestra casa es nuestro templo, pero también nuestro lugar de trabajo. Construir teniendo en cuenta los elementos del Well Building es uno de los ejes de la arquitectura holística. Garantizar viviendas y entornos laborales más favorables y saludables es positivo para todos.